Actualizado el 25 septiembre, 2025 por David Pestana
Con la llegada del frío, la calefacción se convierte en un aliado indispensable para mantener nuestro hogar confortable. Sin embargo, muchos usuarios cometen errores al usar la calefacción que no solo afectan al consumo energético, sino también al confort y la vida útil de los equipos. En este artículo repasamos los fallos más frecuentes y cómo evitarlos.

La calefacción es esencial en invierno, pero usarla mal puede disparar la factura y reducir su eficacia. Conocer los errores más comunes y aplicar buenas prácticas marcará la diferencia en tu comodidad y en tu bolsillo.
Índice de contenido
Subir demasiado la temperatura
Uno de los errores al usar la calefacción más habituales es fijar el termostato en temperaturas demasiado altas, pensando que así la vivienda se calentará más rápido. La realidad es que solo genera un consumo excesivo y un ambiente incómodo.
La temperatura ideal para tu calefacción es de entre 19 °C y 21 °C. Para saber más sobre qué temperatura ideal poner en tu hogar, haz clic en el siguiente artículo: «A qué temperatura se pone la calefacción«
No realizar mantenimiento a los equipos
Un sistema de calefacción sin revisiones periódicas pierde eficiencia y consume más. La falta de limpieza de filtros, purgado de radiadores o revisión de calderas puede provocar averías costosas.
Es altamente recomendable programar una revisión anual para asegurar un funcionamiento ideal.
Tapar radiadores o salidas de aire
Colocar muebles, cortinas o ropa sobre los radiadores es otro de los errores al usar la calefacción más comunes. Esto bloquea la correcta distribución del calor y obliga al sistema a trabajar más.
Es por eso que mantener las zonas de emisión de calor despejadas es esencial si deseas tener todos los rincones de tu hogar bien climatizados.
No aprovechar la luz solar
Muchas personas dejan las persianas bajadas durante el día, desaprovechando el calor natural del sol. Eso obliga a la calefacción a funcionar más horas de lo necesario.
Aconsejamos dejar las cortinas y persianas abiertas durante el día y cerrarlas por la noche para conservar el calor acumulado, de esta manera tu equipo de calefacción funcionará lo justo y necesario.
No usar termostatos programables
Un error frecuente es dejar la calefacción encendida todo el día o encenderla solo cuando la casa ya está helada. Un termostato programable ayuda a mantener una temperatura constante sin despilfarrar energía.
Ajustar los horarios según tu rutina te permitirá optimizar el consumo y ahorrar económicamente.
Conclusión
Evitar los errores al usar la calefacción es clave para mejorar el confort en tu hogar, alargar la vida útil de los equipos y, sobre todo, reducir tu factura energética. Con pequeños cambios de hábitos y un uso responsable, disfrutarás de un invierno cálido sin gastar de más.


